jueves, 21 de marzo de 2013

18 DE MARZO DIA DEL TRABAJADOR TELEFONICO



 "18 de Marzo, día del Trabajador Telefónico. Por nuestro Secretario Adjunto, el compañero Gustavo Panasiuk". 

Desde la mesa Ejecutiva de la CTA Matanza nos hacemos eco de sus palabras, y enviamos un fuerte abrazo a todos los compañeros telefónicos que día a día luchan por una Argentina más justa e igualitaria. ¡¡¡ felíz día compañeros!!!



Una historia de lucha:

El 18 de marzo, conmemoramos el día, en que nuestro gremio, logró arrancar la decisión, de estatizar la empresa de telefonía, (hasta entonces en manos de los ingleses), dando lugar al momento más importante, de crecimiento de la prestación del servicio telefónico, logrado hasta entonces.
Fue un 18 de marzo del año 1948, fecha en la que el gobierno del General J. D. Perón firmo el acta de nacionalización de la empresa de teléfonos.

 Un incremento  explosivo  de los índices de teléfonos por habitante, al servicio de un proyecto nacional de país en manos de la burguesía, en coincidencia con intereses coyunturales de los trabajadores, que vieron de esa manera, mejorar su situación económica.

Pero ese incremento inicial de la provisión del servicio telefónico, que coincidió con la etapa de desarrollo de la burguesía nacional en el marco de una situación internacional favorable, hubo de estancarse.

Gobiernos civiles y militares, metieron mano en la caja de las empresas estatales, ENTel, FERROCARRILES, YPF, AEROLÍNEAS, etc., no solo para desprestigiarlas, (preparando el camino de la entrega), sino para resolver problemas de déficit de distintas áreas.

Desde la misma administración de estas empresas, se contrajo una parte importante de la deuda externa, ya que estas, siempre estuvieron ligadas a las multinacionales de las comunicaciones, como Siemens, en nuestro país, o la ITT en Chile (que llegó a impulsar el golpe pinochetista).
Estos administradores, firmaban contratos muy perjudiciales para la ENTel, y para nuestro país, y con condiciones sumamente ventajosas para esas empresas. Esos contratos leoninos, fueron investigados y anulados en la década del 70, merced a la lucha de nuestros compañeros. 

 La dictadura militar, instauró el miedo con la represión, cárcel y desapariciones que afectaron a cientos de compañeros. Como en otros ámbitos, sufrimos persecuciones despidos y muchos fueron arrancados de sus lugares de trabajo, para que este plan avanzara.

Los telefónicos, junto al movimiento obrero en su conjunto, sufrimos una gran derrota.

La vuelta a la democracia, no detuvo la ofensiva de los grupos monopólicos. 
El  gobierno de Alfonsín, con el plan Terragno, y el gobierno de Menem con maría julia después, terminaron de destruir la imagen de la empresa estatal, la paralizaron, y luego, a pesar de la enorme y heroica resistencia de los trabajadores, vino el golpe final con la privatización y la entrega.
El neoliberalismo, necesita que  el estado, se encuentre plenamente dedicado a la defensa de los intereses de los grupos económicos más concentrados, sin distracciones ni contradicciones y por ello le exige resignar el papel, de prestador de servicios.

 El concepto de servicio público, y del abonado, fue reemplazado por el de  cliente más a tono con la política en la que “lo que manda es el mercado”.

Así el Buen cliente es el que consume más, y requiere de una atención especial, y el que menos consume, soporta un verdadero mal trato por los dueños del tono.
El estatismo, desprovisto de un análisis, que nos permita ver el mismo carácter del estado administrador de esas empresas, no sirvió.
Es necesario reconocer el concepto erróneo que manejamos durante muchos años, cuando decíamos defender “nuestra” empresa, ya que las empresas nunca fueron de los trabajadores, sino de un estado, que en menor o mayor medida, representó y representa, los intereses de otra clase social.
Por eso, no nos debió sorprender, que el gobierno que diera impulso a la privatización, fuera del mismo partido político, (el justicialismo), que gobernaba en momentos en que paso a manos del estado.

De allí se desprende otro error, que fue no advertir, que era indefendible la gestión, tal cual se la estaba llevando a cabo. Y que era imprescindible elaborar un proyecto alternativo.
La lucha por impedir la privatización, fue una página importante en la lucha de clases. Pero le faltó el sustento político que debió legitimarla desde una propuesta que planteara la superación de la crisis.          

La privatización, fue un instrumento que utilizaron los grupos económicos mas concentrados, para profundizar la dependencia, y aumentar a niveles nunca imaginados, su tasa de ganancia.
Despidos encubiertos, incremento de las jornadas de trabajo, y altas tarifas, llevaron a que estas empresas acumularan cerca de 6 mil millones de dólares, luego de los primeros 10 años de robo, y todo esto con la complicidad de dirigentes sindicales que se refugiaron en el interior del país. La moneda de cambio para pagar su trabajo sucio fue el manejo del PPP, y de empresas colaterales de servicios (cooperativas, tercerismo).
Estos dirigentes sindicales, como guillan, rogelio rodríguez, daniel lópez, etc. fueron responsables de esa entrega.

 La etapa que siguió, tuvo momentos de asenso y recuperación para los trabajadores de nuestro gremio. 

Recogemos de estos momentos un grado de acumulación importante que sirvió a los fines de encarar las exigencias futuras.
Parece que fue ayer, cuando alcanzamos a recuperar en parte nuestros ingresos y hoy a pocos meses ya tenemos que balancear un nuevo retroceso, por el incremento del costo de vida.

Un homenaje

No podía dejar de recordar en este día, a los compañeros y compañeras que hicieron la historia de este gremio.
Es una lista larga de la que faltando pocos días para el 24 de marzo, no podemos dejar de mencionar a nuestros compañeros desaparecidos. 
Quería rendirle un humilde homenaje, a cuatro compañeros/as, con los que tuve el privilegio de militar. Los y las conocí en mi temprana incorporación a la militancia política, cuando me afilie al partido comunista. Así pude conocerlos, en la agrupación en la que participaban activamente:
Delia Boschi, Irene Rodriguez, María Pintos, y  Osvaldo“Mingo” Mingrone.  En ellos quería  ejemplificar a tantos otros y otras, que desde distintos lugares del pensamiento, también dedicaron años de sus vidas, en pos de la clase trabajadora.  

El horizonte

Saludamos las incorporaciones de numerosos jóvenes provenientes de empresas contratistas a la planta permanente así como también el reconocimiento del convenio de FOETRA para los compañeros  de las empresas de telefonía celular.
Sin embargo, no podemos desconocer que el tercerismo, sigue siendo una forma de burlar los derechos de los trabajadores que realizan, al igual que los compañeros que formamos parte de la planta permanente, tareas de telefonía para telefónica y telecom. Evaden impuestos, aportes patronales, pago de asignaciones familiares, aguinaldo, y si reclaman, los despiden.
Hay que terminar con este flagelo, que afecta a muchos sectores laborales no solo telefónicos.
Tenemos por delante un nuevo desafió en las próximas paritarias. Allí esperamos poder recomponer nuestros salarios.  Pero además necesitamos resolver el retraso en nuestras categorías y un plan de carrera que forma parte de los objetivos de corto o mediano plazo para mencionar solo dos aspectos.
Recordar este  día, el  del trabajador telefónico, es releer nuestra historia, escrita con luchas y con mártires, con errores pero también con aciertos con derrotas y con triunfos.
Nuestro destino como telefónicos, no puede despegarse de lo que ocurra con nuestra clase.
Tampoco esta desligado de lo que suceda con los destinatarios del servicio de comunicaciones, los usuarios. Entre ellos, los más perjudicados, trabajadores ocupados y desocupados.
Nuestro futuro tiene que ver también con el proyecto de país; un país con una profunda crisis, o con una economía en desarrollo; con un país con profunda dependencia o liberado; con una sociedad basada en el individualismo y el sálvese quien pueda, o asentada en la solidaridad.
Los tiempos que corren en nuestra región y en nuestro país nos marcan el camino del desarrollo, de la solidaridad y de la liberación como horizonte.  Es el camino de Venezuela, de Chávez y de Maduro.
Por eso cuando pensamos que hacer, tenemos que ser capaces de recoger las enseñanzas, de nuestra historia, profundizar nuestra lucha reivindicativa, sin perder de vista lo que acontece a nuestro alrededor, y dispuestos a incidir  en esa realidad para transformarla.
Tenemos que rescatar el compañerismo verdadero, que es aquel, que se juega para acompañar a los que tienen dignidad, a los que defienden la fuente de trabajo haciéndose respetar, a los que alzan la voz con un reclamo o con una opinión. Y no solo eso, protagonismo y participación.
Por eso los telefónicos, debemos ser  arte y parte en esa pelea. Propuesta para adentro y propuesta para afuera. Por nosotros, por nuestra clase, ocupados desocupados, jubilados, estudiantes, unidad desde la clase. Unidad política, por una propuesta alternativa.
Por nuestro día, por un servicio de telefonía social para todos. Por una empresa estatal, eficiente, con control de los trabajadores, del estado y de los usuarios.

       
P. Gustavo Panasiuk
Delegado de FOETRA Oficina Comercial San justo
Secretario Adjunto de la CTA de La Matanza
Integrante de la CONAT

PORQUE OTRA COMUNICACIÓN ES POSIBLE