En la lucha por más y mejores condiciones de trabajo y en defensa de la educación de todos los estudiantes, el gremio de docentes bonaerense impulsó la creación del cargo de Maestro Especial Intérprete de Lengua de Señas Argentina (LSA). Una vez más la acción gremial da repuestas.
“Como respuesta a la necesidad planteada por los compañeros y compañeros de las escuelas especiales, respecto a las dificultades que se presentaban con la integración escolar de estudiantes sordos e hipoacúsicos, en los distintos niveles del sistema educativo, por la falta de intérpretes de LSA; nuestra organización gremial realizó una presentación ante la Dirección General de Cultura y Educación de la provincia de Buenos Aires, (DGCyE) solicitando la creación de un cargo docente que diera respuesta a esta necesidad” explica Néstor Carasa, quien fue recientemente elegido secretario de Educación Especial del Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires (SUTEBA-CTA), en la lista encabezada por el actual secretario general Roberto Baradel.
Cabe considerar que en 16 escuelas de Educación Especial de la provincia, que atienden a alumnos sordos e hipoacúsicos, a comienzos de este año había 152 estudiantes con esta problemática. Los mismos estaban siendo atendidos por maestras integradoras, que no podían realizar la mediación lingüística que los mismos necesitaban, ya que sólo podían acompañarlos algunas horas y algunos días. La atención de estos estudiantes, según la cantidad de escuelas donde están integrados, requiere de 33 Maestros Interpretes de LSA.
Como especificó Carasa, quien también integra la Comisión de Educación Especial de CTERA y es responsable del área de Educación de la Secretaria de Discapacidad de la CTA, “en muchos casos no es suficiente garantizar la inclusión de los estudiantes en el sistema educativo. Cuando un sujeto no tiene los apoyos y recursos que necesita para aprender, no puede participar plenamente del proceso de enseñanza-aprendizaje, poniéndose en riesgo su aprendizaje y su permanencia en la escuela. La inclusión no resuelve el aprendizaje, sino que se necesita de un proyecto de integración escolar que garantice las condiciones y recursos”.
Desde esta perspectiva, es que el gremio decide avanzar en esta problemática, planteando, entre otras condiciones, que debía ser un cargo docente, que se tenía que ingresar por listado -como cualquier cargo docente- y que el mismo debía ser incorporado en las Plantas Orgánicas Funcionales. Así, la presentación de SUTEBA constó de los siguientes puntos:
Crear el Cargo docente de Maestro Intérprete Pedagógico de LSA.
Encuadrar el cargo de Maestro Especial Intérprete Pedagógico de LSA, en el artículo 12, punto a), XV, del Estatuto del Docente para la Modalidad Educación Especial (Maestro de Especialidad).
Designar Maestros intérpretes en las escuelas especiales que tengan estudiantes sordos con proyectos de integración en los niveles educativos; de educación común y en centros de Educación de Adultos, de Formación Profesional y de Formación Laboral.
Incorporar en el anexo 9, punto 1.6.2, de la Resolución Nº 3367/05 el cargo de Maestro Especial Intérprete Pedagógico de LSA, a razón de uno por grupo escolar.
Esto significa que debe haber un Maestro Intérprete en cada año, grado o curso donde haya uno ó más estudiantes sordos o hipoacúsicos que lo necesiten. El Maestro Intérprete deberá trabajar conjuntamente con los maestros o profesores de la escuela común, articulando su accionar y procurando resolver los problemas de mediación lingüística que se presentan.-donde haya alumnos integrados- en una misma institución educativa.
Respecto a las condiciones para el ingreso al cargo de Maestro Intérprete Pedagógico de LSA, son en 1º término: Intérprete de Lengua de Señas Argentina con título de nivel terciario y Profesor de Discapacitados de la Audición, voz y lenguaje. En 2º término: Intérprete de LSA con título de nivel terciario y Profesor de otra especialidad de Educación Especial. Por último: Interprete de LSA con título de nivel terciario y título de Maestro ó Profesor de nivel primario y secundario.
“Creemos que esto es consecuencia de una construcción colectiva, del trabajo y de la relación permanente con los compañeros y las escuelas y que es producto de la lucha de nuestra organización gremial. Seguiremos peleando por más y mejores condiciones de trabajo y por la defensa del derecho a la educación de todos nuestros pibes”, concluyó Carasa.