domingo, 14 de febrero de 2010

Hugo Yasky: “Hay que terminar de desmontar el neoliberalismo”


Por Nicolás Lantos.

El de Hugo Yasky no fue un verano tranquilo. A los vaivenes de la política local, el titular de la Central de los Trabajadores Argentinos (CTA) le sumó un viaje a Bolivia, donde acompañó al presidente Evo Morales en la asunción de su segundo período, y otro a Chile, para participar en el acto que realizó la Central Única de Trabajadores de ese país en respaldo al candidato Eduardo Frei, antes del ballottage. “Los próximos veranos también van a ser así, movidos”, vaticinó y anticipó también “una resolución a corto plazo” al histórico reclamo de la CTA sobre la obtención de personería gremial.

–El año pasado terminó con una buena noticia para su Central, con un fallo de la Corte Suprema muy favorable a sus reclamos. ¿Cómo cree que será el 2010 en este sentido?

–Yo creo que va a haber nuevos avances. El fallo de la Corte inició una cuenta regresiva que va a terminar indefectiblemente en una solución a la vieja demanda de la Central de libertad y democracia sindical. Lo que ha generado el Poder Judicial a través del fallo de la Corte suma un nuevo elemento de presión sobre el Poder Ejecutivo y entiendo que la presión política para el reconocimiento a los sindicatos que vienen luchando por eso va a tener una resolución positiva a corto plazo.

– ¿Esta solución llegará desde la Justicia, desde el Parlamento o desde la Casa Rosada?

–El proceso que abrió el fallo de la Corte y la repercusión que esto genera en términos políticos va a acelerar los tiempos de la resolución por parte del gobierno nacional. Yo creo que el otorgamiento de la personería gremial a la CTA no va a poder ser postergado por mucho tiempo más.

–Usted sostuvo durante todos estos años una política de acercamiento al kirchnerismo como estrategia para el logro de la personería, incluso contra la opinión de otros sectores de la CTA. ¿Fue una, estrategia acertada, a la luz de los acontecimientos?

–En realidad, la etapa política de estos últimos seis años le planteó a la Central un escenario totalmente distinto del que había cuando los gobiernos aplicaban a rajatabla todo el recetario del Fondo Monetario Internacional y de los grupos cercanos al Consenso de Washington. Con De la Rúa y con Menem, la CTA no tenía otro camino que la confrontación sistemática, no había posibilidad de avalar ninguna de las políticas de esos gobiernos. En cambio, los gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina Fernández transgredieron esta especie de norma de gobernabilidad que se instaló que consistía en aplicar sistemáticamente las políticas que determinaban los grupos concentrados de poder, como por ejemplo con las iniciativas en cuanto a derechos humanos y otros avances importantes, la recuperación del sistema jubilatorio, la posibilidad de recuperar Aerolíneas Argentinas y, más recientemente el avance que significa la asignación por hijo. En este contexto, yo creo que más allá del debate interno de la CTA no podríamos haber tenido la misma política de confrontación. Esto es lo que explica nuestra posición, más que una táctica hacia el logro de la personería.

– ¿Cuál será la postura de la CTA de cara a las elecciones de 2011?

Yo pienso que como Central tenemos una tarea prioritaria e indelegable: lograr que ésta, que es la construcción social más importante de la última década en la Argentina, siga creciendo, se siga expandiendo a nivel nacional y siga incorporando organizaciones para constituirse como una alternativa clara para los sectores populares. Esa es la tarea primordial. Eso no descarta que distintas expresiones participemos de una discusión sobre la construcción de una alternativa política que rompa con el esquema del bipartidismo. Pero la tarea central de la CTA es seguir creciendo como un instrumento de lucha para la clase trabajadora.

– ¿Cuáles serán los ejes del conflicto gremial durante 2010?

–Yo creo que va a haber una disputa en términos más globales, en torno del modelo social y del modelo económico de la Argentina. El debate va a estar en torno de profundizar iniciativas que signifiquen terminar de desmontar la estructura jurídica que sostuvo el modelo neoliberal. Van a discutirse tres o cuatro leyes fundamentales, como la de Entidades Financieras, transformar en ley la Asignación Universal por Hijo, avanzar en el blindaje social. También va a haber una fuerte discusión por los nuevos niveles salariales, va a tomar importancia el Consejo del Salario.

– ¿Cree que se logrará un aumento por encima del nivel de inflación?

–Va a ser una disputa complicada: los grupos empresarios más poderosos, tanto del sector urbano industrial como del sector rural, están tratando de lograr un esquema que introduzca nuevamente la lógica de ajuste permanente. Ahí se va a dar una lucha que va a tener mucha intensidad y que va a preanunciar la pulseada para tratar de volver hacia las viejas políticas. El hecho de que vamos a entrar en un año electoral le va a dar mayor voltaje político a estas luchas.



PORQUE OTRA COMUNICACIÓN ES POSIBLE