La Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) dio inicio a una serie de debates que tienen como faro abordar temas fundamentales de la actualidad nacional y regional. Esta semana, la discusión giró alrededor de la “Propiedad de la tierra: regulación estatal, soberanía y modelo productivo”, problemática históricamente invisibilizada y relegada de la agenda pública.
Del panel de expositores participaron Alejandro Rofman, investigador, profesor universitario y coordinador del Área de Economías Regionales del Plan Fénix; Guillermo Martini, subsecretario de Agricultura Familiar en el Ministerio de Agricultura, ganadería y pesca de la Nación; y Nicolás Arceo, economista de CIFRA y FLACSO, entre otros.
Durante la jornada se reconoció la importancia política de la Ley de Tierras, porque significa seguir avanzando en la recuperación del Estado como una herramienta decisiva para la defensa de los intereses nacionales. Además, fue amplio el consenso sobre la importancia de generar un debate sobre la tierra ―entendida como un recurso estratégico natural, escaso y no renovable― y poder pensar el rol que cumple en el desarrollo productivo de la Argentina. En ese marco es que se vuelve imprescindible la implementación de políticas públicas que asuman un papel central en la protección del recurso, y así surgieron opciones que permitirían profundizar el modelo más allá del límite a los extranjeros, a través, por ejemplo, de leyes de usos del suelo, de arrendamiento y de desalojo.
Entre los asistentes el denominador común fue también compartir la convicción de que debatir sobre la tierra implica poner sobre el tapete el interés legítimo y el derecho de toda una sociedad a disponer de un bien que es productor de alimentos y generador de empleo, por encima de intereses individuales.